Fue en el año 1997, hace 20 años, cuando elaboramos nuestra primera cosecha de Malbec Reserva. Estábamos recién empezando y nuestro proyecto estaba tomando forma, para convertirse en lo que hoy es Altos Las Hormigas. El nombre bajo el cual apareció nuestra primera cosecha fue: “Altos de Medrano Reserva Viña Hormigas”. Elaboramos este primer Reserva con uvas de La Consulta, Valle de Uco. No fueron más de 30.000 botellas, hechas con el entusiasmo de la juventud, pero también con la profesionalidad de Alberto Antonini y Attilio Pagli. En el ’97 no muchos apreciaban el valor de las uvas del Valle de Uco. Vistalba, Agrelo y Perdriel, en la denominada primera zona, acaparaban la atención de los enólogos y bodegas locales. Nuestra curiosidad, que hasta hoy sigue intacta, nos llevó a buscar más allá; un espíritu que plasmaríamos más tarde en nuestro “Proyecto Terroir”.
Bastante ha cambiado para nuestro Malbec Reserva en 20 años. Su nombre, de Altos de Medrano a Altos Las Hormigas. El lugar de origen de sus uvas, de La Consulta a Gualtallary y Paraje Altamira. Su método de crianza, que pasó de barricas de roble de 225 litros a grandes foudres sin tostar. Agradecemos a Mendoza para el maravilloso recorrido de aprendizaje que nos permitió hacer, para llegar a lo que sabemos hoy, a lo que somos hoy… el conocimiento, como el vino, necesita tiempo y maduración.
El paladar de nuestro Reserva, fino y potente al mismo tiempo, se debe, principalmente, al lugar de proveniencia de sus uvas. Desde 2008 venimos trabajando la puesta en valor de las diversas zonas de Mendoza, trabajando inclusive en la cosecha por polígonos (unidades de viñedo que no necesariamente coinciden con un cuartel, sino que están demarcadas por el tipo de suelo que las componen). Por eso elegimos Gualtallary y Paraje Altamira, dos zonas con gran presencia de suelo calcáreo que le brindan al vino esos taninos finos y textura de tiza que tanto nos gustan en el Malbec.
Desde los inicios de este vino recibimos reconocimientos, excelentes comentarios de los críticos más influyentes, que ratificaron nuestro camino. Nuestro primer Malbec Reserva 1997 recibió 91 puntos de Robert Parker, que dijo: “Este maravillosamente estructurado y potente vino está abarrotado de moras, casis (…) Es un vino de sabores muy intensos, pero en el que se reconoce la elegancia del Viejo Mundo”. Actualmente la Revista “The Wine Advocate” de Parker le dio 93 puntos a nuestra cosecha 2014, comentando que “este vino es del gusto de consumidores avanzados, con su sutil mineralidad, su equilibrio y su sabroso, casi salado, final de boca. Este vino es una representación fina y elegante de los suelos calcáreos del Valle de Uco”.
No sólo Robert Parker nos dio palabras de aliento. Tim Atkin consideró a nuestro Malbec Reserva 1999 “uno de los mejores tintos de Sudamérica”; también le dio 93 puntos a nuestra cosecha 2014. A su vez, James Suckling le dio 92 puntos. El Reserva es el vino que estuvo cuatro veces en el ranking “Top 100 Wines of the World” de la revista Wine Spectator, llegando al puesto 42 de los mejores vinos del mundo.
Todos los críticos de vino que han probado nuestro Reserva a través de los años han coincido en atributos que mantenemos desde el principio: el equilibrio y la bebibilidad. Y ese es el hilo conductor que siempre tenemos en mente, más allá de las cosechas o la evolución del método de elaboración. El equilibrio entre la finura en los taninos, los sabores profundos y persistentes, los aromas sutiles pero presentes. Un equilibrio que nunca se desvanece y que deja en el recuerdo del que lo bebe la marca indeleble de un gran origen y de una infinita pasión.